Cada 19 de septiembre se celebra el día internacional de concienciación sobre la mordedura de serpiente con el objetivo de crear conciencia sobre la incidencia mundial de las lesiones por mordedura de serpiente. Además, también se quiere sensibilizar a la población sobre cómo prevenir las mordeduras de serpiente.
Incidencia de las mordeduras de serpiente en el mundo
La Organización Mundial de la Salud estima que entre 81.000 y 138.000 personas en todo el mundo mueren cada año por mordedura de serpiente y hasta 400.000 quedan permanentemente discapacitadas o desfiguradas, como resultado de ser mordidas por serpientes venenosas.
Estas personas muchas veces son discriminadas y condenadas al ostracismo. Además, muchas de ellas no pueden trabajar, pierdes sus ingresos, adquieren deudas y arrastran problemas de salud mental y una mala calidad de vida.
En 2017, la Organización Mundial de la Salud incluyó la mordedura de serpiente a su lista de enfermedades tropicales desatendidas de máxima prioridad y en mayo de 2018, adoptó por unanimidad una resolución que insta a los gobiernos del mundo y a la OMS a abordar problema.
Colombia, al ser un país con condiciones ecoepidemiológicas propicias para la supervivencia de serpientes, es el tercer país latinoamericano con mayor número de casos, después de Brasil y México. Según los registros nacionales disponibles, se han identificado más de 300 especies de serpientes distribuidas en el territorio colombiano, desde altitudes de 0 hasta 3 500 metros sobre el nivel del mar. De estas especies, el 18% son
venenosas.
En el país, existen cuatro familias de serpientes de importancia para la vigilancia en salud pública de los accidentes ofídicos: Viperidae, compuesta por las víboras verdaderas (géneros Bothrops, Crotalus, Lachesis, Bothriechis y Porthidium), responsables de la mayoría de los casos de envenenamiento, cuyo cuadro clínico se caracteriza por síndromes hemorrágicos, edema y daño tisular; Elapidae, que incluye las serpientes corales (género Micrurus), que causan un síndrome clínico caracterizado por parálisis neurológica. En ambos casos, el envenenamiento puede generar daño multiorgánico, lo que ocasionaría muerte o secuelas irreversibles y discapacidad. La tercera familia, Colubridae, comprende serpientes no venenosas o con toxinas de bajo impacto, que causan cuadros locales leves en seres humanos, pero no representan una amenaza para la vida; y la
cuarta familia, Boidae, que son constrictoras que generan agresiones por mordedura pero que no son venenosas (1,5). Con corte a primer semestre de 2023, y comparado con el mismo período de los cuatro años anteriores, se evidenció que la incidencia tuvo una disminución progresiva de 2019 a 2021 y a partir de ese momento, presentó un aumento leve pero constante. La letalidad ha tenido mayor variación a lo largo de estos cinco años.
Eventos para 2023
En 2023, la OMS organiza dos seminarios web para compartir ideas sobre la mejora de la estrategia en casos de mordeduras de serpientes. Los seminarios virtuales están dirigidos a todas las partes interesadas y al público. Puedes conectarte en vivo a través del canal de YouTube de OMS/NTD o vía zoom
Para ampliar esta información te invitamos a escuchar la serie de podcast sobre accidente ofídico con el experto Héctor Charry Restrepo, biólogo naturalista, especializado en ofidio y ofidismo. Conoce todo sobre este interesante tema en siguiente enlace: https://hseradio.com/ophidia/